Cielo de colores, by Igor.Un cuento breve sobre la libertad digital |
Paseamos aplastados por el bochorno. Son las Festes de Gràcia, los niños corren libremente. Están bien las fiestas, hay conciertos inesperados en las callejuelas y papeles de colores flotando en esos canales de cielo que quedan entre las rectas de dos líneas de fachadas. Paseamos y los niños no paran de moverse. Vuelvo a pensar en dejarlos con una sola comida al día, sobre todo en este final de verano que se alarga como los aplausos de un concierto de la Pantoja. In-Necesario. Pepe me dice:
—¿Has oído lo que se dicen en la blogosfera?
—Perdona, es que yo de bielorruso ando flojo.
—Lo de Wikileaks… Que es todo una amplia maniobra para tener la gran excusa y restringir la libertad en Internet.
—Venga…
—Claro, siempre podrán decir, como aquellos nos dejaban con el culo al aire y “para salvaguardar la seguridad nacional” vamos a capar todo lo que haya en Internet y sea susceptible de…
¿Un bol de arroz sería suficiente? Por eso eran apreciados los obreros chinos, el siglo pasado en EE.UU. Comían poco, eran baratos. Me parece una tontería. “Susceptible de” lo abarca todo, a criterio del censor. Pienso en caballos de Troya y cosas así. ¿Con una comida al día dejarían de moverse?
—Primero en USA y luego en Europa —insiste.
—Siempre retrasados nosotros —añado.
Me zampo un helado de higos. Deliciosos los artesanales. Luego una cerveza, luego un cigarro. Esta conversación me pone nervioso.
—Lo verás —me dice.
Volvemos a casa. De un modo u otro siempre volvemos a casa. A la Ítaca soñada. El crepúsculo trae una brisa refrescante y las multitudes asaltan el corazón de Gràcia. Es un tira y afloja bíblico. Libertad y opresión. Siempre encontramos un camino por el que antes no habíamos pasado, con otras fachadas y cruces que no conocíamos.
Qué buen relato de lo mundano y cotidiano. He paseado a tu lado, he oído a los niños vociferar correteando a nuestro alrededor, ahí estaba yo también, siempre lo consigues.
ResponderEliminarLa pequeña vida y las cosas gordas, como Wikileaks, todo mezclado con helados. Gracias por pasarte, y por dejar huella.
ResponderEliminarUn abrazo.
A convertir la anécdota en historia, o lo contrario.
ResponderEliminarPor favor, por favor, creo que no sé qué hacer con este tipo de diálogos, si reír, si quedarme sorprendido, si llorar..., en todo caso un acierto:
¿Con una comida al día dejarían de moverse?
—Primero en USA y luego en Europa —insiste.
—Siempre retrasados nosotros —añado.
Desgraciadamente, es una realidad muy grande. Hay muchos que se niegan a ver los grandes problemas de la vida para no tener que preocuparse. La mayor causa de como le va al mundo hoy en día. Está claro que, como sociedad, aún tenemos mucho que madurar.
ResponderEliminarEl calor, la fiesta, la cerveza, el humo del cigarro...susceptible de confusión. Habrá que meter la tijera, que los helados los carga el diablo.
ResponderEliminarSaludos a Pepe (¿no será un espía?, ten cuidado) y un abrazo para ti.
DEMIAN
Genial relato, Igor. En Gràcia el tiempo se detiene entre helados y coches de choque, y mientras en el resto del mundo todo sigue igual de mal.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Y además de comer helados de higo, veo que pinta. Un artista bastante completo. Yo soy una calamidad con los pinceles.
ResponderEliminarEspero que haya disfrutado de sus fiestas.
Bisous
Llorar o reír. O tirarse al cubo de basura de cabeza. Está escrito que a internet le pondrán vallas. Mi esperanza es que la gente encuentre el modo de, como los topos, agujerear la alambra y pasar al otro lado.
ResponderEliminarPepe un espía. Siempre lo he sospechado, tras su aparencia de hombre de familia. Bien podría serlo. Los mejores espías parecen tipos muy normales.
Madame, disculpas. Se trata de una fotografía que hice y retoqué un poco. De ahí que parezca, realmente, un óleo.
ResponderEliminarPreciosa última frase. Hoy he tenido otro ejemplo de lo que tan bien dices. Que lejano suana wikileaks, que rápido va todo.
ResponderEliminarUn abrazo :)
Excelente la foto, la entrada en si me remite a la aventuras del Cerdotado contra los Muertos Votantes (que se alimentan de las bolsas de comida que regalan los candidatos), te pondria una viñeta a disposicion pero no parecen estar disponibles en la red
ResponderEliminar¡Qué bueno Igor! A esto le llamo yo, el placer de la lectura. Esos niños que no dejan de moverse, esos canales de cielo azul sobre las calles, esa vuelta al hogar que siempre supone el ansiado regreso a Itaca, el sabor del helado de higos... Y toda esa belleza y ese movimiento... para envolver un tema oscuro como el de la censura.
ResponderEliminarEso es talento,y del bueno.
Un abrazo.
Estamos muertos?
ResponderEliminarTodas las revelaciones de Wikileaks y no ha ocurrido nada.
Que nos pasa?
Saludos.
y la vida sigue igual, y cada loco con su tema, a todos nos pasa algo parecido, vivimos en nuestro mundo particular ya sea paseando, comiendo helados, en Ítaca o en la Luna.
ResponderEliminarsaludos.