9 feb 2011

Concursos literarios

Qué hacer con un concurso de literatura...
concursos literarios
Mejor pillar un lápiz y escribir sin pensar en más... by Igor.

Dejar de ir a cenar con tu novia o quién sea que comparte contigo las soledades, pagar una pasta en fotocopias, encuadernaciones, sellos, sobres y papeles relucientes ya huérfanos, acercarse con la ilusión de un pardillo a la oficina postal, hacer cola, hacer cola, hacer cola, esperar, mirar a la vieja que hay delante con un gorro de lana verde, leer las bases de otros concursos para no solaparse, esperar, unas bases que son tan emocionantes como un prospecto de aspiradoras, leer, esperar, leer, buscar, especular sobre posibilidades, mezclar cerezas en un baúl, dejar correr los meses como un preso, esperar, cerrar postigos, esperar, esperar, silencio.




No pagues por escribir. No hagas colas para escribir. No esperes. No escribas.
 
 


Share/Bookmark

27 comentarios:

  1. Ya...¿no se inventó por eso internet??? Ni fotocopias, ni sellos, ni leches, desde que se puede enviar datos adjuntos en formato pdf. Si por mí fuera correos podría cerrar.

    Ánimo y saca a la novia a cenar antes de que compartas solo tus soledades.

    ResponderEliminar
  2. Bueno, yo lo tengo muy claro. No es obligatorio presentarse, hay otras vías

    ¡Saludos!

    ResponderEliminar
  3. Lo que viene a continuación:

    Versión A: Te llaman, te proponen, te invitan, viajas, llegas, te discursean, te pastelean, te parafrasean, te cenan, te vuelven a festonear, festoneas a otros, te firman, firmas a otros, Te preguntan si es la primera vez. Te preguntan por el significado de tal frase o el porqué de ese final tan suelto o tan bien atado, te llevas una caja con unos cuantos ejemplares repetidos de la edición y te dices a tí mismo que no lo estás haciendo tan mal como a veces piensas, le vuelves a dar un palo al ego para que no se suba demasiado, pero un palo pequeñito porque sientes que también te toca disfrutar, es tu momento. El esfuerzo, el dinero, la espera, la espera, la espera, la cola, la cola, el dinero, el dinero, los sobres, los sobres, el interlineado sencillo o doble, los plazos de entrega, el interlineado sencillo o doble, las putas bases de los cojones, la renuncia a participar en otros y la elección fue la acertada. Es tu momento.

    Version B: Esperas, esperas, esperas, esperas..
    dejas de esperar. Escribes, escribes, escribes...

    y vuelta a empezar :)

    Mucha mierda compi.

    ResponderEliminar
  4. Si alguien tiene que pagar, es quien recibe, no quien da
    Y el talento e inspiraci�n que se ofrecen al escribir, ya es demasiado pago como para tambi�n abrir el bolsillo
    Un beso Igor

    ResponderEliminar
  5. Sale caro, sí.
    Al final lo mejor es eso: escribir sin pensar en más.

    Feliz dia, monsieur

    Bisous

    ResponderEliminar
  6. Es una larga espera mi querido Igor, pero si la espera vale el esfuerzo, pues a echarle ganas. Me gustaron las imagenes, sobre todo la de la señora con el gorro de lana verde.

    Un besote,

    Yo

    ResponderEliminar
  7. Ah, me llena de ansidad participar en concursos, me da algo de miedillo...Besitos

    ResponderEliminar
  8. La señora de la gorra de lana verde es eterna. A mí también me gusta mucho.
    Ella espera, espera, espera. Pero juega en otro concurso.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  9. No he participado en ninguno.
    Ni lo haré.

    Escribir y nada más.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  10. Argh! frustración, eterno desencanto... El que inventó los concursos se quedó bien a gusto...

    ResponderEliminar
  11. si hombre, y perderme a la señora de gorro verde apostada tras el mostrador de correos, con sus mocos también verdosos reluciendo en un clinex cercano, todo arrugado y lechuguino...

    o quedarme sin esa espera, de uñas recomidas, con los padrastros ensangrentados en rojo chillón, con la esperanza de manchar el sobre con la respuesta del rechazo más absoluto y genial....

    si hombre!!!!




    "mezclar cerezas en un baúl"... qué grande!!!!

    ResponderEliminar
  12. Qué mal me siento. Yo participé en varios, de joven gané alguno, pero ahora ya casi que ni envío y ya casi que ni escribo ni para enviar ni nada. Uno de joven tiene otras ambiciones y se cree capaz de ganar concursos. El ego a flor de piel. Pero con los años te vas dando cuenta de que tu talento no es tal ni para ganar concursos, y no vale la pena ninguna espera, ni sobres, ni colas, ni el dinero que gastás, porque mandar diez páginas por triplicado desde Sudamérica a Europa es un dinero que no tengo para darme esos lujos al pedo. Recuerdo lo que sufría cuando te pesaban el sobre, porque el costo es de acuerdo al peso, y antes de que te digan cuanto te va a costar uno piensa en si podría haber sido capaz de haber quitado alguna hoja, de haber estirado las sangrías, si no hubiera sido posible poner los datos en una hoja más chica, que cuánto mierda pesa una puta hoja, que como pueden pesar tanto 31 hojas del carajo.
    Y la espera, claro, aunque los años también te hacen aprender a esperar.
    García Marquez sostiene que es fácil ganar concursos: hay que estudiar al jurado para saber que es lo que quieren leer. No es mala idea, por si alguno quiere un consejo.
    Lindo punto el de esta entrada.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Jo, pobre Ígor, cuántos desánimos.

    Tú, ya sabes, has de esperar.

    ResponderEliminar
  14. Por eso hasta ahora he preferido no participar en ningún concurso. Mejor me dedico a escribir, solitario y en silencio, pero tranquilo, sin apuros. Algún quizá, con mejores herramientas que las que tengo hoy.

    Leer y escribir, grandes placeres de la vida.

    ResponderEliminar
  15. En el momento más inesperado quizás engas una recompensa esperándote!

    ResponderEliminar
  16. Estoy recapacitando el escrito seriamente.
    Creo que voy a presentarme al Premio Planeta. ¡Tengo altas posibilidades!

    Joder, con los comentarios se podrían hacer mil posts, hasta relatos de los buenos....
    Saludos,

    ResponderEliminar
  17. No sé de que te extrañas... si tenías la señal delante: la señora del gorro verde, y, ya sabes, el verde es ESPERAnza.
    Decía Cela que el que resiste gana, pero yo no soy un fiel seguidor de don Camilo. Lo soy más de aquel que se preguntaba cuál es el perro más inteligente: el que se aparta de la pelea o el que se sumerge en ella hasta el final.
    Suerte y un abrazo

    ResponderEliminar
  18. Uau, Demián, ese teorema no lo conozco. Imagino que el perro más inteligente es el que se aparta de la pelea.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  19. Ayy....¿Pero es que todavía hay ingenuos que creen en esas cosas?...jajaja.Yo nunca lo haría...claro, es que yo soy muy mal pensada...
    Un saludo, Igor.

    ResponderEliminar
  20. A mí no sé si me gustan o no. He participado en cinco, creo. Gané uno. En otro quedé segunda. En los demás, ni se me menciona. Pero me gusta escribir. Ése es mi premio.

    ResponderEliminar
  21. escribir, mas que tener talento para hacerlo, es un vicio...
    por ello prefiero hacerte caso, temo a la vergüenza pública
    saludos querido Igor

    ResponderEliminar
  22. Pues nunca me he presentado, así que no sé como serán, pero espero que no quiten las ganas de escribir. Personalmente es más una terapia ;PP que otra cosa, necesito un cupo de divagaciones cada cierto tiempo.

    Pero tú ya tienes en marcha una publicación, y sobre todo, creo que disfrutas. Así que, te presentes o no, sigue aquí, que es gratis, y nos gusta leerte ;)

    Saludos :)

    ResponderEliminar
  23. Neng, necessites desfogar-te una estona amb bona cervesa al costat, tenim que fer una nova reunió dels tres genets de l'apocalipsi en breu ^_^

    ResponderEliminar
  24. En estos días que han pasado desde que publicastes este post y que yo lo leo (últimamente siempre a destiempo) seguro que has vuelto a llenarte de energía.
    Tómate esa cerveza...

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  25. ¡Buenas...!
    La idea del texto era reflexionar sobre los concursos, y ver hasta que punto valen la pena o no. Salvo algunos, los más abiertos, creo que sirven para comerse las uñas.
    Saludos Dissortat.

    ResponderEliminar
  26. Yo sigo insistiendo, que los concursos, no son otra cosa, que otra forma de medirse con (o contra algo), que es en este caso un jurado que desconocemos. Un jurado al que se le supone cierto criterio. Superada la etapa de los elogios maternos, de las babas y las palmaditas en las espaldas, que siempre agradecemos de nuestros queridos amigos, es posible que haya un día que uno busque otro tipo de aprobación. Ego? Para qué si no escribimos, sino para alimentarlo? Y en definitiva, para seguir escribiendo. Quién puede afirmar que despreciaría el aplauso del público de un teatro puesto en pie? O 2000 euros por haber ganado el certamen literario de un ayuntamiento; ver su recopilatorio de relatos editado por Punto de LEctura y expuesto en Fnac .. su nombre y el título de su libro en Google... Que levante la mano.

    ResponderEliminar