Bueno, un brevísimo cuento político, casi un chiste o algo así. Una pincelada sobre esta transición en la que estamos inmersos y en la que lo público (estado, autonomías, ayuntamientos, etc.) se empequeñece cada vez más, y más… El cuento se titula, como no, Privatización.
«—¿El señor Rajoy?
—Sí, yo mismo.
—Buenos días. Soy Igor
Kutuzov, un ciudadano descontento.
—Bien… ¿Contribuye usted
fehacientemente al sostenimiento económico del Partido Popular, abanderado de
la libertad en España?
—No.
—¿Entonces…?
»
»
Si no contribuyes, si no consumes, si no donas, si no aportas no importas. Cada vez más la medida la da el poder adquisitivo, esa es tu calidad humana. Si no tienes eso y tampoco tienes valor como objeto publicitario para lo políticamente correcto, estás de sobra.
ResponderEliminarSaludos, Igor!
A eso vamos, a un mundo de lobbies. El poder de lo privado. Y, es fácil, pienso en la Edad Media, donde todo era privado.
ResponderEliminarSi no metes pasta en la organizació o en el sistema, no cuentas. Estás de sobra o de acompañante.
Saludos.
A mí lo que me encanta de los políticos es su enorme capacidad para hablar mucho sin decir nada.
ResponderEliminar—Hola, ¿España tiene arreglo?
—Debes tener en cuenta que la complejidad de los estudios de los dirigentes exige la precisión y la determinación del sistema de participación general. Sin embargo, no hemos de olvidar que el nuevo modelo de actividad estratégica nos obliga a un análisis exhaustivo del modelo integral de desarrollo. Por último, y como definitivo elemento esclarecedor, cabe añadir que la superación de experiencias periclitadas obstaculiza la apreciación de la importancia…
Un saludete.
Está bien.
ResponderEliminarBueno, un breve cuento político y su reflexión. Con un chorro de humor para endulzar.
ResponderEliminarUn abrazo.