12 sept 2014

El problema de la generación Nirvana

El problema de la generación Nirvana, en la que me incluyo, es que vivimos una época de tremenda confusión de la que aún quedan largos cortinajes borrosos. El grupo de música Nirvana lo expresó, expresó ese dolor y esa pérdida de no se sabe muy bien qué. Y la rabia. Aunque, pasado el tiempo, me pregunto que soluciones pusimos sobre la mesa los de la generación Nirvana (un término que me acabo de sacar de la chistera y no sé si existe previamente). ¿Pusimos alguna? ¿Quisimos cambiar el mundo en algo, mejorarlo, hacerlo más justo? ¿Quizá no hicimos nada más allá del amago de rebeldía? ¿Qué utopías nos guiaban? ¿Hicimos tan poquita cosa? Creo que sí. Ahora que empieza a ser tarde estamos empezando tímidamente a dejar la confusión atrás y a construir algo. Todo esto no son más que vaguedades, lo sé, intuiciones tomadas al vuelo. ¿Realmente algo está cambiando? ¿Es tarde? El tópico aburrido de que nunca es tarde es cierto. Todo esto lo digo porque estaba escuchando ahora el disco de Nirvana que, pasado el sedal de los años, más me gusta, el unplugged. ¡Ah! Where did you sleep last night, gran tema que no era de Nirvana, era una canción folk anónima del siglo XIX.



Y aquí otra gran versión, la de la pieza del muy valioso David Bowie, The Man who sold the Word.





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8 comentarios:

  1. El ilustre catalán Josep Plá se preguntaba si las revoluciones servían para algo. Otro catalán ilustrado, Luis Racionero, sostiene que los europeos tenemos arraigado un sentido de culpa consecuencia de la educación judeocristiana... Por ahí van mis pensamientos.
    Hay generaciones o épocas que son más fáciles de catalogar por estar bajo los efectos de unas circunstancias económicas, religiosas, bélicas, etc; pero la mayoría no hay porqué adjuntarle su manifiesto.
    Y una reflexión última, ¿ si el lider de Nirvana hoy estuviera sobre el planeta, sería igual de influyente?
    Saludos!!

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  2. Que confuso me has dejado... No lo sé. Imagino que si Kurt Kobian siguiera vivo tendría notablísima influencia. ¿Sería como Bono, el falso profeta? Lo dudo. Había algo más verdadero, de hecho el resto del grupo sigue haciendo cosas interesantes.
    Josep Pla, el autor de las descripciones magistrales. En cualquiera caso la generación Nirvana ni se acercó al término Revolución. ¿Ahora? Quizá sí, los próximos meses en España van a ser los más interesantes y apasionantes de los últimos decenios. Huelo (Smell like....) un barrido colosal. Quizá, quizá ahora sí se va a hacer, tarde-tarde-tarde-pero no demasiado, la Transición.

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  3. No hicimos ni hacemos nada, pero eso también nos define como generación. Supongo.

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  4. Je, je, je. Eso también nos define como generación. ¿Hemos vivido demasiado bien todos estos años de bonanza? Creo que sí.

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  5. Puede que cada generación quiera cambiar el mundo, pero, con lo que llevamos, no sé si preferiría que cada generación se ciñera a no romper nada de lo que hay valioso. ¡Que eso es antievolutivo!, ¡que defina valioso!
    Pero, vamos, que cada generación va a avanzar, seguro, y va a romper algo valioso, seguro. Incluso, pensaría, las ulteriores generaciones considerarán que tal avance fue estúpido, inexistente, positivo... Con lo que, sobre una misma utopía, ni siquiera habrá acuerdo. ¿Eso es un argumento para abstenerse de hacer algo o para espolear el hacerlo?
    Lo que es seguro es que los recursos son limitados, que las guerras son el camino más rápido para más guerras, que la humanidad tiene por definición la dignidad que su nombre otorga... Vivimos a una altura de la historia que nos permite saber muchas de esas cosas valiosas. Sí, realmente nuestra generación puede evitar romperlas. Esa podría ser una utopía: no romper algo verdaderamente valioso. Que eso es caracterizar la utopía en negativo, una especie de mínimos. Pues sí, quizá.

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  6. Todo un dilema, y más para la primera generación que, en Europa, en los EEUU, vivirá peor que sus padres, y ya no hablemos de cómo vivirán los hijos. Si fuéramos una especie inteligente deberíamos imponer el crecimiento negativo. Las propuestas de crecimiento cero son una idea de mínimos, para no desgastar los recursos de nuestra casa, la Tierra. Y no destruir, por puro consumo, cosas valiosas.
    ¿Alguien se apunta a des-instalar el aire acondicionado de su hogar? Ni siquiera habrá acuerdo. Pensamos en corto, y así seguiremos. ¡Suerte que el espacio no tiene fronteras!

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  7. ¿Sabes que el grupo de edad más propenso a votar por la independencia de Escocia fue el de 25-45 años? La generación que quedó sin nada que perder. A lo mejor es una flor tardía.

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  8. Lo leí, lo leí. Sí, quizá con casi nada por lo que luchar, la flor se abre mucho más tarde. Que lo hacemos todo tarde, está claro. Aunque no sé cómo les irá a los que silenciosamente nos sucedan, porque veo que eso de la incorporación al mercado laboral sigue siendo tardía.
    Bien, viene un par de años con muchos cambios. A ver que pasa....

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